La luz perpetua (2014 – 2016)
Margarethe Drexel
Una mujer irrumpe en un recinto para empujar una lámpara y producir la agitación de una luz. El gesto resulta extraño porque el recinto que violenta con su gesto es un mausoleo en el que reposan los huesos de muertos anónimos. ¿Se trata de una herejía tonta, o es, literalmente, la agitación de una luz que trae vida, expresada como perturbación del reposo de quienes solo pueden ya reposar? El trabajo de Margarethe Drexel está siempre cargado de cuestiones en las que se mezclan la reflexión sobre la vida y la muerte, los límites de la familiaridad, el hogar y el extrañamiento o, más allá, esa cosa que se llama “amor”.
La luz perpetua es un proyecto en proceso de expansión que, para esta versión de la Vitrina, incluye un diseño escenográfico que hace referencia a una pintura clásica de Santa Margarita. Al final, la luz vuelve a aquietarse, pero mientras se mueve, el pensamiento oscila entre esas visiones de los artistas, siempre debatiéndose entre la herejía y la santidad.
Víctor Albarracín – Curador
